ALEJANDRO 273-326 Obispo de la iglesia de Alejandría, Egipto, cuando surgió la controversia arriana. Esta controversia hizo una división profunda en la iglesia y condujo al concilio de Nicea. Alejandro se opuso firmemente a Arrio.
APOLONIO
175-225 Escritor de una obra corta contra los
montanistas. Se sabe muy poco más de él.
ARQUELAO
250-300 Obispo de la iglesia que debatió públicamente
con un maestro gnóstico llamado Manes. De este debate existe aún el informe
histórico.
ARRIO
270-336 Anciano de la iglesia de Alejandría, Egipto, que
discutió con Alejandro sobre la naturaleza de Cristo. Arrio enseñó que Jesús
tenía una naturaleza diferente de la del Padre. Esta opinión se condenó por el
concilio de Nicea.
ARNOBIO
260-303 Apologista cristiano que escribió poco antes de
que subiera Constantino al trono. Lactancio era uno de sus alumnos.
ATANASIO
300-373 Obispo de Alejandría después de la muerte de
Alejandro. Escribió varios tratados teológicos y defendió ardientemente el
credo de Nicea.
ATENÁGORO
150-190 Apologista cristiano. Antes de su conversión fue
un filósofo griego. Su apología se presentó a los emperadores Marcos Aurelio y
Comodo alrededor del año 177 d. de J.C.
BERNABÉ
ANTES DE 150 Escritor de una carta que circulaba extensamente
entre los cristianos primitivos. Los cristianos primitivos por lo general
creían que Bernabé, el compañero del apóstol Pablo, escribió esta carta, pero
muchos de los eruditos actuales dudan que él fuera el escritor.
CAYO
180-217 Anciano de la iglesia de Roma. Escribió varias
obras contra los herejes mayores de ese entonces.
CELSO
125-175 Filósofo pagano romano que escribió un ataque
feroz contra el cristianismo, al cual respondió Orígenes brillantemente.
CLEMENTE DE ROMA 30-100 Obispo
del primer siglo de la iglesia de Roma. Evidentemente un compañero personal de
los apóstoles Pedro y Pablo (Filipenses 4.3) Escribió una carta a los corintios
hacia el fin del primer siglo.
CLEMENTE
DE ALEJANDRÍA 150-200 Instructor de nuevos
conversos Otro filósofo que halló el cristianismo en su búsqueda de la verdad
fue Clemente. Viendo la vanidad de la filosofía humana, se volvió a Cristo.
Después de convertirse en cristiano, viajó por todo el imperio romano, aprendiendo
los preceptos de la fe cristiana personalmente de los maestros cristianos más
ancianos y estimados. Los escritos de Clemente, fechados hacia el año 190,
reflejan la suma de la sabiduría de sus maestros. Han inspirado a muchos
cristianos a través de los siglos, inclusive a Juan Wesley. Con el tiempo,
Clemente se mudó a Alejandría, Egipto. Fue ordenado anciano en aquella
congregación y encargado de instruir a los nuevos conversos. Orígenes era uno
de sus alumnos. Por lo general se le llama “Clemente de Alejandría” para
distinguirlo de otro Clemente, quien era obispo de la iglesia en Roma a fines
del primer siglo. En este libro, si no lo explico de otra manera, cuando hablo
de “Clemente” me refiero a Clemente de Alejandría.
CIPRIANO
200-258 Un rico que todo lo entregó a Cristo Uno de los
alumnos espirituales de Tertuliano se llamaba Cipriano. Había sido romano rico,
pero se convirtió en cristiano a la edad de 40 años. Aunque alumno de
Tertuliano, no se unió a los montanistas. Siempre se opuso a los herejes y a
las tendencias sectarias. Como cristiano recién convertido, Cipriano estaba tan
agradecido por su vida nueva en Cristo que vendió todo lo que tenía y lo
repartió a los pobres. Se gozó de estar libre del peso de las responsabilidades
de sus posesiones materiales. Sus escritos contienen unas de las palabras más
conmovedoras que jamás se han escrito acerca del nuevo nacimiento del
cristiano. Su entrega total a Cristo pronto ganó el respeto de la iglesia en
Cartago. Después de unos pocos años, en una decisión sin precedente, le
llamaron a ser obispo de la iglesia allí. Los escritos de Cipriano tienen un
valor especial ya que constan mayormente de cartas personales a otros ancianos
cristianos e iglesias. En sus cartas vemos los intereses y los problemas diarios
de las congregaciones cristianas de aquel entonces. Muchas de las cartas que él
escribió todavía existen, como también las cartas que le fueron escritas.
Cipriano se vio obligado a trabajar como pastor clandestinamente, ya que
durante la mayor parte de su ministerio rugía la persecución contra la iglesia.
Como pastor, trabajaba incansablemente, dando su tiempo y su vida por el rebaño
de Cristo que le había sido encomendado. Al fin, fue aprehendido por los
romanos y decapitado en el año 258.
EUSEBIO
270-340 Obispo de la iglesia de Cesarea cuando
Constantino ascendió al trono. Escribió una historia de la iglesia, detallando
al cristianismo desde los días de Jesús hasta el tiempo de Constantino.
FÉLIX,
MINUCIO 170-215 Licenciado romano que se convirtió al
cristianismo. Escribió una apología brillante en pro del cristianismo, en forma
de un diálogo entre un cristiano y un pagano. En la obra actual se cita por el
nombre “Félix”.
GNÓSTICOS
El grupo más grande de herejes durante el período de la iglesia
primitiva. El gnosticismo empezó mientras vivía el apóstol Juan y siguió bajo
varios nombres hacia la mitad de la Edad Media. Había muchas variaciones en su
doctrina, pero todos tenían unos puntos en común, entre ellos éstos: (1)
Afirmaban haber recibido una ciencia superior (gnosis) de Dios; (2)
creían que los humanos fuimos creados por un dios inferior, dios que no era el
Padre de Jesús; y (3) creían que el Hijo de Dios no se hizo hombre en verdad.
HERMES
ANTES DE 150 Autor de una obra alegórica titulada El Pastor,
la cual se leía extensamente en las iglesias cristianas primitivas y era muy
estimada por ellas. Algunos de los cristianos primitivos creían que el autor
era el mismo a quien se refirió el apóstol Pablo en Romanos 16.14, pero su
testimonio no se puede confirmar.
HIPÓLITO
170-236 Obispo de la iglesia, escritor, mártir, y alumno
de Ireneo. Su obra más importante se titula La refutación de todas las
herejías.
IGNACIO
50-100 Obispo de la iglesia de Antioquía y discípulo
personal del apóstol Juan. Fue ejecutado hacia el fin del primer siglo.
IRENEO
120-205 Eslabón importante con los apóstoles Uno de los
discípulos personales de Policarpo fue Ireneo, quien después se mudó a Francia
como misionero. Cuando el obispo de la congregación en Lyon fue muerto en una
ola de persecución, Ireneo fue llamado para tomar su lugar. La iglesia en todo
el mundo elogiaba a Ireneo como hombre justo y piadoso. Como discípulo de
Policarpo, quien a su vez era discípulo del apóstol Juan, Ireneo sirve como
eslabón importante con la época de los apóstoles. Fue martirizado cerca del año
200.
JUSTINO
110-165 Filósofo convertido en evangelista Durante la
vida de Policarpo, un filósofo joven llamado Justino emprendió un viaje
espiritual en búsqueda de la verdad. El solía andar en un campo solitario que
miraba hacia el Mar Mediterráneo para meditar. Un día mientras andaba allí vio
que un anciano caminaba tras él. Deseando la soledad, Justino se dio vuelta y
miró bruscamente al anciano intruso. Pero el anciano no se molestó. Más bien
comenzó a conversar con Justino. Al aprender que Justino era filósofo, el
anciano le hizo preguntas escudriñadoras, preguntas que ponían a la luz lo
vacío de la filosofía humana. Años después, Justino contó los recuerdos de
aquel encuentro, escribiendo: “Cuando el anciano había terminado de hablar
estas cosas y muchas más, se fue, exhortándome a que meditara en lo que había
hablado. Desde entonces no lo he visto, pero de inmediato una llama se encendió
en mi alma. Me inundó un gran amor por los profetas y los amigos de Cristo.
Después de reflexionar más en lo que el anciano me había dicho, me di cuenta de
que el cristianismo era la única filosofía verdadera y valiosa.” Aun después de
convertirse al cristianismo, Justino siempre se ponía su túnica de filósofo
para dar a conocer que él había hallado la única filosofía verdadera. En
verdad, él se convirtió en evangelista para los filósofos paganos. Dedicó su
vida a aclarar el significado del cristianismo a los romanos cultos. Sus
defensas escritas a los romanos son las apologías cristianas más antiguas que
existen. Justino se demostró evangelista capacitado. Convirtió a muchos romanos
a la fe cristiana, tanto cultos como incultos. Al fin, un grupo de filósofos,
tramando su muerte, le mandaron aprehender. Justino escogió morir antes de
negar a Cristo. Fue martirizado hacia el año 165 durante el reinado de Marco
Aurelio. Después de su muerte, fue conocido por muchos como Justino el mártir.
LACTANCIO
260-330 Maestro del hijo del emperador Lactancio es poco
conocido a los cristianos de hoy en día. En esto, nosotros perdemos, porque
Lactancio escribió con claridad y elocuencia extraordinaria. Antes de
convertirse al cristianismo, fue instructor célebre de la retórica. Aun el emperador
Diocleciano le alabó. Después de su conversión, dedicó sus habilidades
literarias a la causa de Cristo. Sobrevivió la última gran persecución de los
romanos contra la iglesia al principio del cuarto siglo. Con el tiempo, hizo su
hogar en Francia. Aunque Lactancio era muy anciano cuando Constantino se hizo
emperador, éste le pidió que volviera a Roma para ser el profesor particular de
su hijo mayor. Los escritos de Lactancio tienen gran importancia para nosotros
porque se escribieron al final de la época pre-Constantina de la iglesia.
Demuestran ampliamente que la gran mayoría de las creencias cristianas habían
cambiado muy poco durante los 220 años entre la muerte del apóstol Juan y el
principio del reinado de Constantino. Su obra cristiana principal se titula Introducción
a la religión verdadera, o Los institutos divinos.
MARCIO
110-165 Gnóstico prominente del segundo siglo. Formó su
propia iglesia y formuló su propio Nuevo Testamento.
METODIO
260-315 Obispo de la iglesia de Tiro y mártir. Escribió
contra algunas de las especulaciones excesivas de Orígenes.
MONTANISTAS
Secta que se llamó el movimiento de “la profecía nueva”, pero la
iglesia la llamó “montanistas” por su fundador, Montano. Ellos afirmaban que el
Consolador o el Espíritu Santo seguía dando ordenanzas a la iglesia. Los
miembros de la secta a menudo “profetizaban” mientras se encontraban en un
frenesí emocional incontrolable.
ORÍGENES
185-255
Tortura de Orígenes,
Alejandría 204 d.C.
Una mente aguda
dedicada a Dios- Entre los alumnos de Clemente en Alejandría había un joven
hábil llamado Orígenes. Cuando Orígenes tenía sólo 17 años, estalló una
persecución severa en Alejandría. Los padres de Orígenes eran cristianos
fieles, y cuando su padre fue apresado, Orígenes le escribió una carta,
animándolo a que permaneciera fiel y no renunciara a Cristo por causa de su
preocupación por su familia. Cuando se anunció la fecha para su juicio,
Orígenes decidió acompañar a su padre al juicio para morir con el. Pero durante
la noche anterior, mientras dormía, su madre escondió toda su ropa para que no
pudiera salir de la casa. Así es que se le salvó la vida. Aunque tenía sólo 17
años, Orígenes, alumno de Clemente de Alejandría, se distinguió en la iglesia
de Alejandría por el cuidado amoroso que prestaba a sus hermanos en la fe
durante la persecución. Pero las turbas enfurecidas también notaron el cuidado
de Orígenes por los cristianos perseguidos, y en varias ocasiones Orígenes
apenas escapó con la vida. Orígenes había aprendido la gramática y la
literatura griega de su padre, y empezó a dar clases privadas para sostener a
sus hermanos menores. Era maestro tan sobresaliente que muchos padres paganos
mandaron a sus hijos a recibir instrucción de Orígenes. Pero muchos de estos
jóvenes se convirtieron en cristianos como resultado del testimonio de
Orígenes.
Mientras tanto,
Clemente, el maestro encargado del adoctrinamiento de los nuevos conversos,
estaba en peligro. Los oficiales de la ciudad tramaron su muerte, y él se vio
obligado a escapar a otra ciudad para continuar su servicio cristiano. En una
decisión extraordinaria, los ancianos cristianos de Alejandría le nombraron a
Orígenes, de sólo 18 años, para tomar el lugar de Clemente como maestro principal
en la escuela para los nuevos conversos. Fue decisión sabia, y Orígenes se
dedicó de corazón a la obra. Dejó su profesión de pocos meses como instructor
de gramática y literatura. Vendió a plazos todos sus libros de obras griegas,
viviendo en la pobreza de lo poquito que recibió mensualmente de la venta de
ellos. Rehusó aceptar sueldo alguno por su trabajo como maestro cristiano. Y
después de sus clases de cada día, estudiaba las Escrituras hasta horas
avanzadas de la noche.
Pronto Orígenes
llegó a ser uno de los maestros más estimados de su día. A los pocos años,
algunos de sus alumnos le pidieron que diera una serie de discursos de
exposición bíblica, comentando sobre cada libro de la Biblia, pasaje por
pasaje. Los alumnos pagaron escribas los cuales escribieron lo que Orígenes
decía, y estos escritos llegaron a ser los primeros comentarios bíblicos que se
produjeron. No fue intención de Orígenes que estos comentarios se tomaran muy
en serio. A menudo él se salía del texto y daba suposiciones personales. En
todo el comentario, mantuvo un espíritu apacible, poco contencioso. Muchas
veces terminó su discurso, diciendo: “Bien que así me parece a mí, pero puede
ser que otro tenga más entendimiento que yo”. Orígenes tenía una de las más
brillantes mentes de su día. Estaba en correspondencia personal con uno de los
emperadores romanos. Pero su fama también atrajo la atención de los enemigos de
los cristianos. Varias veces tuvo que trasladarse para otro lugar para escapar
de la persecución. Sin embargo, llegó a los 70 años. En ese entonces sus
perseguidores lo aprehendieron y lo torturaron. Pero por más que lo torturaron,
él no negó a Jesús. Y al fin dejaron de torturarlo, exasperados. Con todo,
Orígenes nunca se recuperó de la tortura y al fin murió.
POLICARPO
69-156 Discípulo y compañero personal del apóstol Juan.
El martirio de Policarpo servía de modelo de fe y de devoción a las
congregaciones de Asia. En su juventud él acompañó al apóstol Juan
y aprendió a sus pies. Evidentemente, Juan mismo lo ordenó como obispo de la
congregación en Esmirna.2 Si es correcto que “los ángeles” de las siete
iglesias de Apocalipsis se refieren a los obispos de las iglesias, entonces “el
ángel” de la iglesia en Esmirna pueda haber sido el mismo Policarpo. (Véase
Apocalipsis 1.20 y 2.8.) Si es así, qué grato es notar que el Señor Jesucristo
no reprendió en nada a la iglesia de Esmirna. Policarpo vivió hasta una edad de
por lo menos 87 años. Fue martirizado alrededor del año 155 d. de J.C.
TERTULIANO 140-230
Apologista
a los romanos A los cristianos del occidente, Tertuliano es quizás el más
conocido de todos los escritores cristianos de los primeros siglos. Llegó a ser
anciano en la iglesia de Cartago en el África del norte. Tertuliano era uno de
los apologistas más hábiles de la iglesia primitiva. El escribió en latín, no
en griego como la mayoría de los cristianos primitivos. A Tertuliano se le
recuerda por varios dichos famosos, por ejemplo: “La sangre de los mártires es
la semilla de la iglesia”. Tertuliano escribió entre los años 190 y 210 d. de
J.C. Además de sus obras apologéticas, Tertuliano escribió varias obras cortas,
tanto cartas como tratados, para animar a los cristianos apresados o para
exhortar a los creyentes que mantuvieran su separación con el mundo. Al final de
su vida, Tertuliano se unió a la secta montanista, la cual por lo general se
aferró a la doctrina cristiana ortodoxa, pero añadió normas estrictas sobre la
disciplina en la iglesia y el trato duro del cuerpo. Por lo menos la mitad de
las obras de Tertuliano se escribieron antes que él se hiciera montanista. Y
además, ya que este grupo no se apartó de los fundamentos de la fe cristiana,
aun sus escritos de después tienen gran valor en iluminar el pensamiento de los
cristianos primitivos. Con todo, hemos citado de sus obras montanistas sólo con
mucho cuidado.
muy buenos los resume, de cada autor de la biblia?
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